La pandemia del covid-19 paralizó las actividades deportivas grupales a nivel mundial y los gimnasios, natatorios y centros deportivos de Mendoza esperan por una solución. Andrea De Marco, presidenta de AMGA (Asociación Mendocina de Gimnasios y Afines) explicó la dramática situación que se vive en el sector.

"Fuimos los primeros que tuvimos que cerrar nuestras puertas y nuestros ingresos dependen exclusivamente de la cuota de nuestros alumnos. Nos declaramos en emergencia económica", comentó De Marco.

A la espera de una respuesta, explicó qué necesitan: "Pedimos cuatro cosas: exención del pago de Ingresos Brutos, exención del pago del impuesto municipal de comercio por 180 días, que nos ampare en la suspensión de servicios hasta tanto se reactive la actividad y un subsidio a nuestra actividad para poder hacerle frente a alquileres y honorarios profesionales".

"Nuestras empresas hacen un aporte social, deportivo y de salud, no somos solo entretenimiento y ocio como se cree. Y son muy pocos los gimnasios y natatorios que van a poder sobrevivir a esta cuarentena. Muchos propietarios no podrán hacerle frente a los costos fijos", reconoció la presidenta de AMGA.

"Hay 8000 centros deportivos en el país, donde trabajan de forma directa alrededor de 80 mil personas y de manera indirecta 180 mil. El 45% puede subsistir apenas una semana más sin ingresos. Hay centros que ya tuvieron que cerrar y se estima que muchos están al borde de la quiebra", explicó citando un informe de Mercado Fitness.